Daniel Notta, el gerente de Puerta que presidirá el Inym

El ingeniero agrónomo de 71 años trabaja para Yerbatera Misiones SRL, perteneciente a la familia del ex gobernador. Fue el primer presidente del organismo y vuelve en medio de la crisis del sector.
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Será el segundo paso del puertista por el instituto.

Daniel Notta, el primer presidente que tuvo el Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), vuelve a esa función dos décadas después, de la mano del gobierno de Javier Milei.

Si bien el nombre del gerente de Yerbatera Misiones SRL, perteneciente a la familia del ex gobernador Ramón Puerta, viene circulando hace varias semanas, la decisión se oficializó ahora por parte de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, cuyo titular es Fernando Vilella.

De esta manera, Notta sucederá a Jonás Peterson, quien ejercía el cargo de forma interina tras el alejamiento de Juan José Szychowski para ser diputado provincial por la renovación.

La designación del ingeniero agrónomo de 71 años se da en medio de la crisis del sector, luego de que los productores pararan la cosecha y salieran a las rutas para exigir mejoras en el precio de la materia prima, una imagen que recreó el “tractorazo” que dio origen al Inym, allá por 2002.

Gerente puertista

Aparte de manejar los molinos de los Puerta, Daniel Notta lleva más de 35 años como productor yerbatero. En los años 90, fue nombrado por el entonces ministro de Economía, Domingo Cavallo, al frente de la Comisión Reguladora de la Yerba Mate (Crym), organismo que el propio funcionario menemista disolvió.

Tras el surgimiento del Inym, el oriundo de Pergamino, provincia de Buenos Aires, fue erigido como su primer presidente, pero se alejó del cargo al poco tiempo, enfrentado con los colonos.

“Ellos querían subir el precio de golpe y yo escalonadamente”, recordó sobre aquel momento en una entrevista reciente, en la que dejó trascender su visión respecto de la situación actual del sector.

En cuanto a la limitación de nuevas plantaciones, sostuvo que “la medida está bien, coincido con la cuestión de fondo, pero no estoy de acuerdo con las formas”, explicó al medio digital Plan B en 2021.

“No hay un acuerdo y hay sectores que quieren dominar sobre los otros, hay una grieta entre el productor y el industrial, el molinero, que parece que es mala palabra”, indicó y postuló: “Yo creo que el Inym tiene que dedicarse fuerte a la calidad y la promoción”.

Precisamente, el mega DNU de Javier Milei le quitó al Inym la primera de esas funciones, junto con la de fijar precios, decisión desreguladora muy festejada por el puertismo, aunque la Justicia misionera suspendió la medida en favor de un amparo presentado por productores.