Finalizando el período de seis años como senador nacional, el ex gobernador de Misiones Maurice Fabián Closs analizó su presente y futuro político, así como su relación con el co-fundador del Frente Renovador de la Concordia Social, Carlos Eduardo Rovira, con quien aseguró no hablar hace “bastante”.
El vicepresidente de la Cámara de Senadores de la Nación comentó que, pese a sus dos décadas de trayectoria, “siempre ando”, aunque admitió que “por ahí no con la intensidad de otras épocas”, le dijo al periodista José “Pepe” Levy, que lo entrevistó para el programa El Foro, que se emite por Misiones Cuatro.
Al referirse a sus últimos meses como legislador nacional, cargo que dejará desde el próximo 10 de diciembre, Closs repasó que “hace 23 años que he iniciado la tarea pública, primero de forma no electiva, siendo jefe de gabinete del segundo gobierno de Rovira, y luego dos cargos electivos, que me han hecho legislador nacional un par de veces, y dos veces también gobernador”.
Ante esa realidad, el ex jefe del Estado misionero entre 2007 y 2015 reconoció que, ahora, “toca un impasse, y en buena hora que así sea”, lanzó sobre su futuro inmediato y agregó: “Soy de aquellos que cree que la política tiene puertas de entrada, que están abiertas y son grandes, y también debe tener sus puertas de salida”.
Consultado si la “puerta de salida” es definitoria y sobre sus expectativas para lo que viene, el senador entendió que “para quienes transitamos la política casi de niño, como es mi caso, es una manera de vivir, uno nunca se va a desconectar de la política”.
No obstante, Closs analizó que “uno también sabe qué roles ocupa y en qué espacios está y cuán importante uno es, si es considerado y cuántas coincidencias y no coincidencias hay”, indicó y sentenció: “Entonces, claramente este es un tiempo en el que no tengo la relevancia que tuve a principios de siglo, hay que decirlo con todas las letras”.
“Yo últimamente hablo mucho como político, pero también me permito hacer análisis y, en ese análisis, pienso en mi situación y mi situación política, en el espacio que hemos fundado en su momento, no es la misma”, postuló Closs y expresó: “Cuáles serán las razones, por ahí no soy yo el que debe responder, pero esa es la realidad de las cosas”.
Cercanía con la Renovación, lejanía con Rovira
“Uno nunca deja de ser”, siguió el dirigente oriundo de Aristóbulo del Valle, hoy de 52 años, una edad que el entrevistador calificó de “plenitud” para la política, a lo que Closs respondió: “Coincido plenamente, pero las situaciones son así”.
“En este momento, hay dos cosas que son verdades”, se explayó el también empresario y expuso: “Soy joven y seguramente tengo todavía mucho para dar y, en algún momento en la historia futura, formaré parte, pero también es cierto que hace 20 años que estoy, las dos cosas son ciertas”.
“¿Por qué ese alejamiento?”, insistió el periodista y, casi pisando la pregunta, el ex gobernador se apresuró a clarificar: “Yo no estoy alejado de la Renovación, bajo ningún punto de vista”.
“Trabajo constantemente, los intendentes así lo saben, mis contactos con las filas de la Renovación son constantes, especialmente en el territorio”, continuó y subrayó: “Y te voy a decir por segunda vez, es probable que muchas de las preguntas que vos te hacés yo no sea el destinatario y no tenga las respuestas”.
Con esos dichos, se habilitó la pregunta obligada: “¿Cuánto hace que no hablás con Rovira?”, a lo que el socio fundador del Frente Renovador sentenció: “Bastante”.
“Las cosas son mutuas en estos casos, es decir, te voy a responder personificando, sino en una cuestión actitudinal”, completó el legislador, bajándole el tono a la disputa, y sumó: “Yo soy muy agradecido a la política y a la Renovación, pero también soy muy respetuoso de los espacios y también de mi dignidad”.
“Yo no voy a andar, a esta altura de mi vida y con las cosas que he sido y con lo bien que me he portado, a los codazos para subirme a ningún escenario, no es mi forma de ver la política, nunca lo hice”, lanzó y recordó: “Me subí en etapas fundacionales de la Renovación y también acompañando a Cacho Barrios o a mi viejo, era porque en el escenario era importante y se creía que podía sumar”.
En ese marco, también descartó representar, más adelante, un sector político por fuera del Frente Renovador, al reflejar que “yo no estoy en una retirada para tomar carrera, que quede absolutamente claro”.
Por ello, clarificó que “por ahí si ven en fotos que estamos en reuniones de amigos, es porque yo digo siempre que uno puede dejar de hacer política, dejar de tener tribuna, dejar de tener candidaturas, pero que uno no pueda tener una reunión de amigos, que venimos de años de trayectoria, eso es lo que a mi me mantiene y lo voy a seguir haciendo”.
“Mi teléfono va a estar abierto para que me llamen y hablar de politica, de economía o de lo que sea, como ex gobernador, como ex senador, como vecino, voy a seguir activo, pero no en la formación de un espacio de poder, por lo menos en los próximos años esa no es mi visión, pero sí voy a estar activo, voy a seguir recorriendo y dispuesto a este tipo de charlas, desprovistas de ambiciones”, aseguró sobre su futuro en la vida pública.
Radicalismo, “sin vocación de poder”
En la continuidad de su análisis político, el dirigente con origen en el partido centenario abordó la situación de la Unión Cívica Radical (UCR).
“A nivel nacional lo veo muy bien, como quizás una de las fuerzas políticas más orgánicas, habiendo tenido resultados electorales muy buenos y garantizando un poder territorial muy importante, que creo que va a ser la única malla de contención del futuro de Juntos por el Cambio”, comenzó diciendo el ex presidente de la Juventud Radical.
Sin embargo, “todo eso no se ve en la provincia de Misiones”, fustigó el también ex titular del comité provincial del radicalismo y desplegó: “No es porque no lo veo yo, no hay una Unión Cívica Radical dentro del espacio de Cambiemos con vocación de poder, que significa tener ganas de ganar y de desplazar a quien está, acá y en la China comunista”.
“No tengo dudas algunas. Solamente basta ver la campaña de (Leandro) Zdero en Chaco y ver la campaña de (Martín) Arjol acá para darte cuenta quién tenía vocación de poder y de correr al que estaba y quién no”, arremetió el ex gobernador, “y eso la gente lo lee y por eso los resultados electorales, nadie le da el poder a alguien para que sea jefe del Ejecutivo si no lo ve con vocación de poder”.
